Es perfecto para limpiar nuestro cuerpo, para sentirse pacífico y amable al frente de las otra personas, es un momento perfecto para equilibrar tu ser.
El mejor lugar para meditar es un lugar tranquilo, donde no seas interrumpido, que no sea ni muy frío ni muy cálido, lo ideal es buscar un lugar donde se sienta cómodo, sentarse sobre algo que le de apoyo, y que sea suave, lo recomendable es sobre un colchón de lana, algodón o piel de oveja.
La meditación puede ser en cualquier momento del día, pero lo preferible es durante la primeras horas del día entre las 4 y 8 de la mañana. Esto puede durar según el tipo de meditación, puede llevar desde los 3 minutos a las 2 horas y medias.
La forma de vestir no influye, solo debe ser con una tenida con la que te sientas cómoda/o.
Se recomienda que las personas que meditan se alimenten moderadamente, debido a que la meditación es una forma de sentirse saludable con uno mismo, y la alimentación influye mucho en nuestros cuerpos.
En la meditación influyen dos factores uno que los mantras y la respiración. El mantras consiste en uso de sonidos básicos, de los cuales el ritmo penetre la mente y direccionamiento de los pensamientos, para los cuáles eliminan nuestros miedos, nuestras limitaciones para estar bien. En la meditación, también ocupa la respiración, que consiste mas que nada en es controlar el tiempo de inhalar y exhalar.
Un consejo es:
Siéntate con la columna erguida, en una confortable posición de sastre o en una silla con ambos píes planos en el suelo. Relaja tus manos en tu regazo, con las palmas hacia arriba, con la mano derecha descansando encima de la izquierda. Mantén los hombros relajados y la parte superior del pecho ligeramente elevada para mantener erguida la columna. Los ojos están cerrados 9/10 partes, permitiendo que entre un poco de luz.
Lleva tu atención al flujo de tu respiración, respirando tan solamente a través de la nariz. Primera, presta atención a la respiración, a cada parte del proceso de inhalar y exhalar, con todos los diminutos movimientos del cuerpo. Después de un par de minutos, empieza a conscientemente respirar con más lentitud.
Deja que los pensamiento vengan y se vayan, como si fuera el ruido de fondo de gente hablando alrededor tuyo en una fiesta. Simplemente deja ir los pensamientos, permaneciendo atento al flujo y las sensaciones de tu respiración. Continua durante 6-8 minutos más. Para finalizar, inspira profundamente, exhala, y de nuevo inhala profundamente mientras estiras tus brazos hacia el techo. Exhala y relájate.
Aquí les va una pequeña clase de meditación y relajación
Bibliografia:
Publicado por:
Fernanda Riquelme.
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